Posee el sello de la Denominación de Origen Trapense, siendo una de las once cervezas que pueden llevar esta exclusiva etiqueta. De color marrón muy oscuro y con una corona de espuma blanca no demasiado persistente. En nariz resulta muy compleja y se abre con aromas a malta tostada y notas especiadas y afrutadas a ciruelas secas y uvas pasas; mientras que en boca, aunque deja notar su contenido ABV del 9 %, presenta un acertado equilibrio entre su amargor y su dulzor y un sabor amplio y persistente, de largo retrogusto.